Princesa de un reino inexistente, princesa de un reino robado por una ilución;
¡OH, Pobre princesa, perdida en un ensueño fatal!
esperando el dia en que su príncipe en su corcel venga a buscarla.

Pobre princesita sucumbida en el engaño de la malvada bruja,
cada mañana le susurras al viento con tu suave melodia,
para que el viento apure los pasos de tu salvador.

Princesa, torpe e ingenua, aun creyendo en cuentos de hadas;
con tu vestido arrugado y manchado por el tiempo miras por tu pequeña ventana,
princesita tus ojos cansados estan de soñar. Ahi estas, creyendo en tu propia mentira!